Resumen
En este trabajo reflexionamos en torno a las prácticas de cuidado y su relación con la identidad femenina a partir de la mirada de mujeres involucradas en un contexto de migración internacional. Partimos del supuesto de que, en principio, las mujeres cuidan patrimonios –herencias y bienes transmitidos de generación en generación: la lengua, la casa, la familia, las tradiciones, los hijos-. En segundo lugar, planteamos que el cuidado del cuerpo es un elemento central de las prácticas de cuidado femeninas, de donde se desprende el planteamiento de entender al cuerpo como patrimonio. Sostenemos que los cuidados en torno al cuerpo de las mujeres y de los patrimonios tienen como función principal mantener el orden social en la comunidad, el cual se interioriza, además, como un elemento fundamental del deber ser femenino. El trabajo se basa en una selección de narrativas de mujeres que viven en localidades con altos índices de migración México-Estados Unidos y que son ellas las que se quedan a la espera, son por tanto las esposas, hijas, madres y hermanas de varones migrantes. Las entrevistas fueron recopiladas a lo largo de varias temporadas de trabajo de campo etnográfico, en proyectos relacionados con la familia y migración, que tocan el tema de las prácticas de cuidado femeninas en localidades en Michoacán, México. Encontramos que la idea de cuidado no comprende el bienestar propio de las mujeres o su salud, sino que va encaminada a cuidar lo de otros, cuidarse para los otros y cuidarse de los otros.